Mi
manzanita, mi hijo querido te ame desde que estaba en mi vientre, desde niño todos
me decían ese niño tiene un ángel muy especial. Cuando naciste estrenamos el
hospital tu y yo, eras el único bebe, así que imagínate las atenciones que
tenias, tu hermanito estaba loco por llevarte a la casa y tu papa también, yo tranquila
porque desde el momento que vi tu hermosa carita sabia que nuca me separaría de
ti.
Desde niño fuiste
introvertido y observador tu naciste para ser un gran espectador, nuca quiere
ser el centro de atracción, pero lamentablemente todos están atento a tus
comentarios y observaciones, eres de pocas palabras, pero cuando hablabas la
tierra tiembla.
Te has convertido
en un hombre trabajador, leal a tus convicciones, leal a tu familia y amigos,
eres bondadoso con los demás, sabes perdonar y pedir perdón que es algo muy difícil.
Eres mi
amigo, mi hombro, eres mi manzanita, eres orgullosamente mi hijo.
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